Omo ValleyEtiopía.

Etiopía.


Los condicionantes geográficos.

Etiopia se sitúa en el conocido y estratégico cuerno de África. Limita al norte con su antigua provincia de Eritrea, al sur con Kenia y Somalia, al este con Djibuti y Somalia, y al oeste con Sudán.
Su relieve montañoso queda dividido en cuatro regiones naturales. El norte dominado por el macizo etíope, donde el monte Ras Dashan alcanza los 4550 m de altitud, y su entorno conocido como las montañas Semien, con una altura media de 2400 m, alberga el parque natural con su mismo nombre y así como poblaciones de monos gelada, Ibex walia y del lobo etíope . La presión humana en esta zona protegida es cada vez mayor, por parte  de gente que busca subsistir dentro de los límites del parque.

La llanura de Danakil, con tórridas temperaturas que fácilmente pueden alcanzar los 50º, que en su parte más baja en Dallol, llega a 116 m bajo el nivel del mar. Es una zona de aguas sulfurosas y de gran actividad volcánica. Así el volcán Irta´ale  está en continua erupción desde el año 1967, y alcanzar su cima para ver la lava, es viable, pero vencer sus 613 m de altura es un gran reto pues el calor y los gases que emana son sofocantes, esto sólo se puede conseguir ascendiendo por la noche, para mitigar un poco las altas temperaturas del entorno.
El centro, con la depresión del Valle del Rift, donde se encuentran alineados de una serie de lagos que han inundado dicha depresión. Partiendo de la capital Addis Abeba camino del sur, con la frontera con Kenia, encontraremos por orden los lagos: Koka, Ziway, Langano, Abijata, Shala, Awasa, Abaya, Chamo y el lago Turkana. El lago Chew está prácticamente seco en la actualidad.  Algunos de los lagos, de aguas salobres, son el hábitat de miles de flamencos, otros son el lugar de descanso de gigantescos cocodrilos y de grupos de hipopótamos donde los aldeanos pescan tilapias, peces gato y otras especies locales. Algunos son foco del peligroso protozoo giardia lamblis, por lo que hay que tener cuidado cuando se visitan sus orillas.

Finalmente la región del Ogadén, en el sureste, formada por mesetas semidesérticas. Los únicos mamíferos que han soportado el empuje humano en la zona, han sido las hienas y dromedarios domésticos.

 

El clima

Cuenta con un clima cálido y húmedo, con temperaturas que van de los 20º C a los 30 º C, así como una época de lluvias.
En la zona del río Omo, los meses de abril, mayo y octubre, la lluvia hace impracticable las pistas, y los arroyos se desbordan fácilmente  por lo que es muy difícil avanzar aun en todo terreno.
Las mañanas entre los meses de noviembre marzo pueden ser realmente frías en la zona del altiplano.

Un poco de historia etíope. Los comienzos.

Los orígenes históricos de Etiopía conviene  buscarlos en el reino de Axum, que ya existía en el siglo II a. C. En el siglo IV se introdujo, desde Egipto, el cristianismo, en su versión copta alejandrina. El poderoso reino empezó a decaer tras la derrota de La Meca (570) frente a los musulmanes. En 1270 se inaugura la dinastía Salomónica, la cual da inicio al Imperio de Etiopía, y que entre los siglos XV y XVI abarcaba las provincias de Tigré, Amhara y Shoá.
La llegada de los europeos
En la Edad Media los conocimientos que se tenían en Europa sobre Etiopía eran una mezcla de elementos legendarios con atisbos históricos.  Se sabía que en Oriente existía un reino cristiano al mando de un mítico Preste Juán, al que se buscaba como aliado para un posible ataque a los musulmanes. Durante la época de los primeros viajes ultramarinos, a fines del siglo XV llegaron exploradores portugueses, como Pedro Covilham, que creyó haber encontrado el reino del Preste Juan. Con los portugueses llegaron también los primeros misioneros jesuitas, destacando de manera especial el madrileño Pedro Paéz, que se convirtió en un influyente personaje de la corte, que consiguió la conversión del negus Susneyos. Aparte de su actividad constructora, fue un notable viajero y fue el primer europeo en ver las fuentes del Nilo Azul y navegar por el lago Tana.

Período de Gondar

A fines del siglo XVII el emperador  Fasiladas el Grande traslada la capital del reino a Gondar, al norte del lago Tana, decreta la expulsión de los jesuitas y persigue el catolicismo, e inicia el denominado período Gondar, que llegaría hasta el año 1769, y que se caracterizaría por el aislamiento internacional.

Era de los Príncipes

Entre 1769 y 1855 se extiende el período denominado la Era de los Príncipes, caracterizado por el debilitamiento de la dinastía salomónica, con múltiples conflictos religiosos entre cristianos y musulmanes, y entre el emperador y los señores feudales. A lo que había que unir la presencia de ingleses, franceses e italianos en la zona, dispuestos a ocupar aquellas tierras. Los que tenían una mayor ambición eran los italianos, para los que la ocupación de Etiopía supondría unir sus colonias de Eritrea y Somalia. Los acontecimientos de finales del siglo XIX son especialmente interesantes y confusos.

El Imperio. Reinado de Menelik II


En 1872 el príncipe Hassai el Tigre subyugó todo el territorio etíope  a excepción de Xoa, coronándose en Axum como Negus y adoptó el nombre cristiano de Juan IV. En 1884 el nuevo emperador pactó con el almirante inglés Newet un convenio que le aseguraba el libre comercio en el puerto eritreo de Massaua, pero al ocupar los italianos esta población, el emperador se manifestó contrario frente a los nuevos colonizadores. En 1887 una columna italiana al mando del mayor Boretti fue atacado por el Ras Alula en Dogali, aniquilándola por completo. Italia decidió apoyar al príncipe Menelik, negus de Soa desde 1855. El 9 de marzo de 1890 el emperador Juan murió en Metemmet. Su sobrino Mangascha fue desposeído por Menelik II, con la ayuda de los italianos con quienes firmó el pacto de Wuchale, que ya habían ocupado Karen y Asmara, territorio que fue reconocido con el nombre de colonia de Eritrea. Una cláusula en la versión italiana convertía a Etiopia en una protectorado, lo que provocó que Menelik lo rechazase. Italia, en lo que pensaba que sería una fácil victoria, invadió Etiopia en 1895, con un ejército de 20.000 hombres al mando del general Baratieri. En Adua, el 1 de marzo de 1896, Menelik derrotó a los italianos, que se vieron obligados a reconocer la independencia etíope en el tratado de Addis Abeba. En 1855 con la subida al trono de Menelik II comienza la historia moderna de Etiopía, iniciando una serie de importantes reformas, aboliendo la esclavitud, fundó una capital, Addis Abeba, y proyectó instaurar la enseñanza obligatoria.


El Imperio. Reinado de Haile Selassie I.


A Menelik, muerto en 1913, le sucedió su nieto Iyasu V que se convirtió al Islám y se proclamó descendiente de Mahoma. Sus súbditos cristianos lo depusieron tres años más tarde. Fue proclamada emperatriz la hija de Menelik, Zuditi, siendo su regente y heredero el ras Tafari, el futuro Haile Selassie I,  que llegó al trono en 1930. Al año siguiente otorgó una Constitución que proclama su el origen divino de sus poderes.

La ocupación italiana.


  Pero Italia no había olvidado la derrota de Adua, y el régimen mussoliniano en pleno fervor expansionista, consideró que había llegado el momento de la venganza y de convertir en realidad el Imperio Italiano. El 3 de octubre de 1935 el ejército italiano, sin previa declaración de guerra, ahora al mando del mariscal Bono, volvía a invadir Etiopia desde Eritrea. La Sociedad de Naciones ginebrina impuso sanciones a Italia. A pesar de que numéricamente los etíopes superaban a los italianos, estos los superaban en armamento y capacidad estratégica. El 31 de marzo de 1935 el mariscal Graziani, sustituto de Bono, conseguía la victoria en la Batalla de Maychew, donde fue aniquilada la Guardia Imperial. El emperador Haile Selassie I partía para el exilio, y el 5 de mayo los italianos entraban en Addis Abeba. El rey de Italia, Víctor Manuel III era proclamado emperador de Abisinia, que se integraba en el África Oriental Italiana.
La posguerra
Durante la Segunda Guerra Mundial, los italianos al principio consiguieron ocupar la Somalia británica, pero la derrota italiana en África devolvió el poder a Haile Selassie. En 1952 la ONU aprobó la federación de Etiopía y de Eritrea, que sería anexionada en 1962, donde se formó un núcleo de resistencia e independentismo. El emperador estableció una nueva constitución que reconocía el sufragio universal, pero el carácter absolutista continuaba.

Período comunista


El emperador tuvo que hacer grandes equilibrios durante la política de bloques durante la guerra fría. En 1974 en medio de una aguda crisis política y social, cuando una pavorosa hambruna ocasionó cerca de medio millón de muertos, una revolución derrocó al emperador Haile Selassie, asumiendo el poder una Junta Militar conocida como el Derg. En 1977 asume el control del Derg Mengistu Haile Mariam quien instauró una dictadura en la forma de régimen socialista. Durante este periodo se socializa la economía, se instaura el Terror rojo, persiguiendo a la Iglesia y las antiguas clases nobiliarias,  se alinea de parte del bloque soviético y se combate el analfabetismo, logrando reducirlo de un 90% a un 37%. Como el pasara unos años antes, el país vuelve a sufrir una terrible hambruna en 1984, en parte debido a los numerosos frentes abiertos contra las guerrillas internas, entre ellas las independentistas de Eritrea y contra Somalia, que invade Etiopía en 1984, en parte a causa de la destrucción de masa forestal propiciada por la dictadura en sus políticas de industrialización. Gracias a la ayuda de un contingente militar cubano, la invasión somalí es rechazada. La caída de los regímenes comunistas y la desaparición de la Unión Soviética tiene sus consecuencias en esta parte de África. Megistu decide acabar con el régimen de partido único e introduce la economía de libre mercado.

Época contemporánea

En mayo de 1991 el régimen comunista es derrocado en medio de una guerra civil. Meles Zenawi al mando del Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope alcanza la victoria armada sobre Menghistu, que huye a Zimbabue, y es proclamado presidente, iniciando un periodo de reformas políticas y sociales que le llevan a abandonar la dictadura de corte marxista. En Eritrea el  Frente Popular de Liberación de Eritrea proclama la independencia, algo a lo que el nuevo gobierno tampoco estaba dispuesto a permitir. Entre 1997 y 2000 hubo una nueva guerra que finalizó con la independencia de Eritrea y, bajo el patrocinio de la ONU y la OUA se obtuvo la paz definitiva. En el año 2001 fue elegido presidente Girma Wolde-Giorgis, que durante la época imperial fue presidente del Parlamento.

 

Viaje fotográfico al Valle del Rio Omo  // WebSite: http://www.omo-valley.com // Email: valleomo@gmail.com